miércoles, 29 de junio de 2011

·Pearl Harbor

" Le voy a entregar todo mi corazón. Pero no creo que sea capaz de ver un amanecer sin pensar en ti. Te querré toda mi vida"

lunes, 13 de junio de 2011

·Pum pum... pum pum

Tu corazón late fuerte, son  imprescindibles sus latidos frenéticos y  sientes que no puedes más. Que tu mundo se derrumba bajo tus pies que te abrasa cada poro de tu seca piel. Todos los recuerdos laten por tus venas, inundando tu cuerpo. Un escalofrío escala por tu columna y te hace vibrar a su compás. Y cierras los ojos, apretas los puños clavándote las uñas en la palma de la mano y te sientes aliviada al notar que la ligera presión se desmorona cuanto chillas, cuando gritas desgarrándote la garganta. Gritas todo lo que no te dio tiempo de decirle. Gritas con la impotencia de saber que no puedes hacerle feliz, que no eras la persona que pedía. Gritas con la esperanza de poder olvidarle. Y gritas, al fin, con la ilusión de querer hacer volar tus recuerdos a una isla remota de tu alma olvidada, guardarlos bajo el peso de la inconsciencia y que se quedaran atrapados en los brazos de Morfeo para siempre, como un pequeño dragón dormitado en las ruinas de un misterio. Como el sueño que nunca quisiste soñar y que al final llegaste anhelar. Abres los ojos tras una cortina de lágrimas enganchadas a tus vértices. Respiras hondo, el dolor, la sensación y el vacío desaparecen poco a poco. Tu corazón se ralentiza, despacio, muy despacio, como la taza de café que se toma su propio tiempo para enfriarse. Los decibelios de tus latidos bajan lento, muy lento y se oye el lejano murmullo de su música....Pum pum, pum pum.

domingo, 12 de junio de 2011

·No la dejes ir

 Cuando ames a alguien, no te pares a pensar que la vas a tener para siempre, todos sabemos que lo que empieza algún día acaba, así que el día que la mujer ideal para ti te mire y te sonría, y tu creas que tienes el mundo en tus manos, no te pares a pensar en eso, no pierdas el tiempo y ámala como nunca has amado a nadie, como nunca amaras, ámala con toda tu alma. Y el día que se vaya, sabrás que todo ese tiempo a su lado ha merecido la pena. Y hazle caso al dolor, es lo único que te demuestra que ella fue real.

·¿Te gusta sufrir?

La única manera de ser feliz es que te guste sufrir. El verdadero amor no se consigue con la satisfacción de un deseo físico ni con la necesidad de compañía de un espíritu, se logra con respeto, conocimiento y sobre todo: elecciones difíciles. A veces hay que sacrificar lo que mas amamos y si ese sacrificio se hacer por amor, es seguro que solo nos dará la felicidad de lo que amamos.

·Error

No todos aprendemos del error, no todos maduramos... ni a todos nos perdonan. Si hay alguien quien te ha perdonado por equivocarte, ten en cuenta de lo mucho que ha de haber sufrido cuando le fallaste, así que no lo tomes a la ligera y si algún día tienes que perdonar, hazlo... recuerda lo bien que sentiste cuando te perdonaron a ti...

·Dios

Sería muy simpático que existiera dios, que hubiese creado el mundo y fuese una benevolente providencia; que existieran un orden moral en el universo y una vida futura; pero es un hecho muy sorprendente el que todo esto sea exactamente lo que nosotros nos sentimos obligados a desear que exista.

·Fuma, mata

-¿Desde cuándo fumas?
-Desde que he querido olvidar, es la mejor medicina creeme.
-¿La nicotina?
-No; el suicidio. Ya sabes, fumar mata.

·Fin

Siempre me he preguntado como será terminar tu propio libro, qué se sentirá al culminar con la palabra F I N un texto conmovedor del que estés orgulloso, un libro que no te encargue nadie, uno que escribas porque te apetece o necesitas escribirlo, uno que te salga del corazón. Tal vez algún día lo haré, pienso muchas veces....Pero no, recapacito enseguida, mejor no engañarse. Siempre escribiré las historias de otros. Siempre, a lo  sumo seré testigo de los sentimientos que surjan desde el volcán del corazón de otros.

·Calor de la llamas

El hombre más sabio que jamás conocí, me había explicado en una ocasión que no existía en la vida experiencia comparable a la de la primera vez en que uno desnuda a una mujer. Sabio como era, no me había mentido, pero tampoco me había contado toda la verdad. Nada me había dicho de aquel extraño tembleque de manos que convertía cada botón, cada cremallera, en tarea de titanes. Nada me había dicho de aquel embrujo de piel pálida y temblorosa, de aquel primer roce de labios ni de aquel espejismo que parecía arder en cada poro de la piel. Nada me contó de todo aquello porque sabía que el milagro sólo sucedía una vez y que, al hacerlo, hablaba un lenguaje de secretos que, apenas se desvelaban, huían para siempre. Mil veces he querido recuperar aquella primera tarde en el caserón de la avenida del Tibidabo con Bea en que el rumor de la lluvia se llevó el mundo. Mil veces he querido regresar y perderme en un recuerdo del que apenas puedo rescatar una imagen robada al calor de las llamas

La sombra del viento

lunes, 6 de junio de 2011

·Ella se sonríe

Alguna vez, la encuentro por el mundo y pasa junto a mí, y pasa sonriéndose, y yo digo ¿Cómo puede reír? Luego, asoma a mi labio otra sonrisa de dolor, y entonces pienso: Acaso ella se ríe, como me río yo

G.Adolfo Bécquer. 

·Máquina

Dices que tienes corazón, y solo lo dices, porque sientes sus latidos.Eso no es corazón, eso es una máquina, que cuando se mueve, hace ruido

sábado, 4 de junio de 2011

·Dolor

Ese es un sufrimiento insignificante si lo comparas con el que puede originar el amor. Algún día es posible que tengas que pagar un precio muy alto por todo el placer y la alegría que el amor provoca. Y cuanto mas inténsamente ames, más intenso será el dolor futuro.
Conocerás la angustia de los celos, de la incomprensión, la sensación de rechazo y de injusticia. Sentirás el frio hasta en los huesos y tu sangre hará cubitos de hielo que correrá por debajo de tu piel. La mecánica de tu corazón explotará. Yo misma te instale este reloj, conozco perfectamente los limites de su funcionamiento. Como mucho es posible que resista la intensidad del placer, pero no es lo suficiente solido para aguantar los placeres del amor.